Con la que está cayendo en todo el orbe quisiera
recomendaros uno de esos descubrimientos divertidos que hice hace algunos meses
y al que es muy fácil acceder. Así relajáis un poco los músculos de los
hombros, recuperáis el caos de vuestra respiración y tonificáis vuestras
apretadas mandíbulas y neuronas.
Se trata de la película "YES MAN"
(traducida en España como "Di que sí") que provoca cada pocos minutos
la risa floja, esa tan necesaria, tan sana y estimulante. Pero ¡ojo! esta es
una de esas comedias con poso. Entre risa y risa, o entre fotograma y fotograma, os pondrá delante un escondido
espejo subliminal donde os veréis reflejados a vosotros
mismos, os hará parar, mirar a vuestro alrededor y preguntaros... ¿Qué narices estoy haciendo
con mi vida?
Argumento: Carl Allen (interpretado por Jim Carrey,
el de las muecas imposibles) es un amargao que amarga a todo aquel que está
cerca. Tiene buenos amigos que hacen lo posible porque reaccione, pero él
parece disfrutar más en su propia desgracia y vida gris. Es un zombi, un muerto
viviente, monocromático, soso, previsible... ¡un asco, vamos! Hasta su mejor amigo ya se da por vencido. Pero un día alguien le lleva a una
sesión de esas multitudinarias que dan tanto miedo de un gurú de la new-age que
con una simple y corta palabra parece cambiar la vida de todo el mundo (mientras
se llena el bolsillo, claro). Esta palabra es
"SÍ". A partir de entonces, el protagonista no podrá evitar
decir "Sí" a todo... ¡a TODO!:
¿Quieres hacer
puenting? SÍ!
¿Aceptas todas las
ofertas de la teletienda? SÍ!
¿Quieres conseguir a
la chica de tus sueños? SÍ!
¿Quieres aprender
coreano? SÍ!
¿Quieres coger el
primer vuelo a cualquier lugar? SÍ!
¿Podrías darme 100 $? SÍ!
Así que podéis imaginar en los líos en los que se mete.
Bueno, ya os he contado bastante, tan solo os diré que visionar esta película
es un buen comienzo para lo que consideréis que esté por venir en vuestra propia
vida, es decir, para que aprovechéis todas esas oportunidades que pasan por
delante de vosotros (a veces pequeñas y otras más grandes) y que perdéis por
culpa de prejuicios, dinero, miedos, pereza o complejos (yo también me
incluyo). Y es que, ante un Carl Allen anulado
por completo por los deseos de los demás, surge una persona muy diferente según
va dominando este nuevo hábito.
Hay que ser muy valiente o muy tonto para decir
"Sí" a todo. Eso juzgadlo vosotros mismos... La película exagera muchas
situaciones para abrirnos los ojos. ¿Se pueden poner límites? La lógica nos dice
que la única restricción a ese "Di que sí" sería si las consecuencias
físicas o morales que sufriríamos y sufrirían terceros fueran negativas. A
partir de ahí si no lo hacemos es por motivos que cada cual debería analizar y
que normalmente se llaman excusas.
Os animo a decir "Sí" durante unos días a lo que
se os presente, con la única cortapisa que he mencionado antes.
- ¿Te apuntas a una carrera solidaria de 10 km por la
ciudad? Sí! (no puedo correr pero
iré andando)
- ¿Quieres ponerte un sombrero vaquero para ir a recoger a
los niños al colegio? Sí!
- ¿Te apuntas a un curso gratuito de contabilidad? Sí!
- ¿Te apetece decir a alguien de una vez eso que siempre le
quisiste decir? Sí!
- ...
¿Cuáles serían vuestros "Síes"? ¿Qué os frena? ¿Estáis
esperando a tener una operación a corazón abierto, un accidente, un día de esos
en los que volvéis a nacer para atreveros con la vida? ¿No os habéis auto impuesto demasiados" Noes" ya?
Creo que ningún actor podría haber encarnado mejor al
verdadero protagonista de esta historia, el escritor Danny Wallace que, en un arrebato de locura o genialidad,
decidió pasarse unos cuantos meses diciendo "Sí" a todo y plasmó sus
experiencias y reflexiones en un libro, el que inspiró la película. ¿Sabéis qué
contestó cuando le pidieron hacer un cameo en la misma, no? Obvio. Y si queréis pasarlo mejor aún os recomiendo que veáis las
tomas falsas... ¡Jim Carrey en estado
puro!
No os doy más sermones. Ved la película, disfrutad y sacar
vuestras propias conclusiones. Yo por mi parte voy a practicar esto del
"Sí" porque no me quiero perder nada bueno que no sepa apreciar a la
primera de cambio.
¿Vais a ver la película, verdad? Sííííííííííí !
Así me gusta ;)