martes, 30 de junio de 2015

Mens Sana in Corpore Sano




En estos últimos años se ha puesto de moda el ejercicio físico de una manera que no había visto desde que Eva Nasarre nos hacía brincar con el aeróbic en el salón de casa allá por los años '80.

Por todas partes se ve gente con mallas negras bien ajustadas y camisetas de colores chillones, ya sea en bici, corriendo o acudiendo religiosamente a un gimnasio. Lo hacen con pasión y móvil pegado al brazo registrando sus pálpitos y esfuerzos mientras escuchan música a todo trapo para fundirse en el trance del ritmo cardíaco, dejan la mente en blanco y aguantan sin inmutarse las tensiones musculares y mentales, por ejemplo la de de preguntarse por qué narices están haciendo eso.



El atuendo es algo muy importante y forma parte del ritual del ejercicio físico, vale todo lo que nos ayude a meternos en faena y además debe estar a la última (unas zapatillas normalitas y chándal de algodón no motivan igual)

Otra cosa muy importante es poner nombres ingleses a cosas que durante toda la vida se han conocido como "hacer gimnasia" y así  lo que hacemos es cool y quedamos genial ante las pobres almas que solo sacan al perro por las noches. Parece ser que cuanto más rara es la actividad en cuestión más indescifrable es el nombre y más auténtica y poderosa es para conseguir un alto rendimiento.

Fitness, bodyjam, bodyattack, bodycombat, ciclo, step, bodystep, dance, running, airfit, zumba step, spinbike, streching... ya me agoto con solo escribirlos y sí, también en el gimnasio nos ponen la música  a tope mientras el entrenador nos increpa como si fuésemos los 300 previa batalla y nuestra vida y patria estuvieran a punto de enfrentarse al Imperio Persa ¡Todo sea por hacer ejercicio físico!

Las lesiones... son un orgullo, una herida de guerra que demuestran a los demás, y a nosotros mismos, que practicamos deporte y nos lo tomamos en serio. Vamos al fisio que nos pone unas tiras de esas de colores y deseamos retomar la actividad cuanto antes porque es importante para sentirnos mejor.

Pues sí, por encima de bromas y modas toda esta gente hace bien, porque al final de lo que se trata es de disfrutar con ello, sentirse mejor física y anímicamente e incluso conocer gente nueva que nos tienda la mano para engancharnos a esas sensaciones de bienestar y salud. El ejercicio físico genera endorfinas, esas sustancias que nos hacen sentir genial sin tomar ninguna droga, mientras nos tonifica los músculos, nos fortalece el cuerpo y el alma, nos hace pensar con más optimismo, claridad, descargando tensiones y culpas a cada zancada o salto que arrastramos en esta vida nuestra (y si no que se lo digan al personaje que interpreta George Clunny en "Quemar después de leer" )




Y sí, el ejercicio físico es más importante para la salud de nuestro cerebro que para la de nuestros músculos, así lo dice el neurólogo y fisiólogo Álvaro Pascual-Leone, y eso... ¡es estupendo!

Pero todo esto ya lo sabíamos, ¿verdad?

Ahora que estamos en plena carrera, concentrados en nuestro buen ritmo y sensaciones... os pido ese esfuerzo extra de gimnasia mental:

 ¿Qué os parece si damos un paso más lejos, más alto y más fuerte? Vayamos más allá de la esta moda llena de parafernalia, la que toca, y aceptemos que una moda pasa y otra llega.

Esta moda, que en occidente lleva ya mucho tiempo reinventándose y haciéndose más sofisticada, aún no ha llegado ni de lejos a expresar o representar de una manera más profunda la esencia de lo que significa hacer ejercicio físico. No, no hablo del rollo místico de los surfistas con cabalgar sobre la gran ola y todo eso, aunque mole bastante.
Solo los orientales con sus artes marciales nos han enseñado que la disciplina mental y física deben tener una unión que va más allá de ser una técnica de ataque o defensa. Esta unión debe impregnar todos los aspectos de nuestra vida, nuestra moral y nuestro autocontrol.

Los buenos practicantes de las artes marciales lo tienen claro. Saben qué están haciendo y cuál es su sentido y significado, saben que no se trata tan solo de pegar o defenderse con elegancia... el autodominio, la concentración y la simbiosis cuerpo-mente para conseguir el movimiento perfecto en estado de flujo está por encima de todo y éso, practicando solo spinnign a todo trapo por mucha endorfina que segreguemos es imposible de lograr. Ya nos lo decía Bruce Lee, y no solo con lo de "Be water, my friend"



El gran logro de hoy es la consolidación de la Psicología del Deporte que, aunque volcada de lleno en la consecución de objetivos y el alto rendimiento, sobre todo en la alta competición, va llegando a niveles donde nos movemos los demás mortales pero aún no llega a este concepto oriental.

En occidente solo nos hemos aproximado a ese "secreto" (otra palabrita de moda) durante los años de la Antigua Grecia. Los griegos, ese pueblo que lo inventó todo, idealizaron el cuerpo del atleta y lo compararon con los de los dioses y héroes. Cualquier muchacho aspiraba a ser un reflejo de esa belleza o excelencia moral, esfuerzo, voluntad y victoria. Aún podéis contemplar este pensamiento en el Museo Arqueológico Regional de Madrid (ubicado en Alcalá de Henares) hasta finales de julio en la exposición temporal "Dioses, Héroes y Atletas"



Pero los filósofos, que no eran tontos, criticaron con ferocidad a esos mismos atletas por no cultivar su mente, tener poco cerebro y solo pensar en pasarlo bien a costa de una gloria desmesurada (más o menos lo que se piensa hoy de algunos futbolistas)
Aristóteles se hartó tanto de los atletas que sentenció que existía una separación entre el cuerpo y la mente y dictaminó que la segunda era la verdaderamente importante. Otros pensadores se le sumaron, luego los cristianos acogieron la idea con ilusión y así hasta casi el siglo XX, donde los únicos que se ejercitaban eran los hombres forzudos de los circos.

Así que pensadlo bien... tan importante es cuidar nuestro cuerpo para tener sana la mente como cuidar nuestra mente para tener un cuerpo sano y longevo. Todas las enfermedades psicosomáticas lo reflejan y todas las enfermedades mentales también. Además, de rebote nuestras relaciones sociales serán también más sanas.

Hacer ejercicio físico regular y variado, leer mucho, reflexionar, meditar, aprender autocontrol y auto-observación esforzándonos en ello cada día, a cada paso, salto o zancada... si lo lográis habréis superado el ideal griego y seguro que hasta los dioses os mirarán con envidia ¡y quién sabe si el gran Aristóteles también!  

Pensad por un momento si aquellos atletas se hubieran cultivado más o sus entrenadores no hubieran pensado únicamente en que ganaran los juegos olímpicos... han sido muchos siglos de desprecio al cuerpo humano visto solo como contenedor de un alma que debe rehuir sus placeres para merecer el cielo... Paguemos el gimnasio con orgullo pero no privemos a nuestra mente de buenos estímulos. Tengamos un entrenador para nuestro cuerpo y un entrenador para nuestra psique.





Aprovechad cualquier motivo para quedar con otros y hacer ejercicio, fomentar relaciones y reírse un rato...  por ejemplo, hay montones de carreras sociales que aglutinan beneficios tanto para nosotros como para la causa que persiguen. El buen rollo que generan las hacen irresistibles.




¡Disfrutad del verano sin lesionaros!



  • Dr. Pascual Leone: El ejercicio físico es muy importante para el cerebro  en "El Hormiguero"... ¡No os lo perdáis!


                              https://www.youtube.com/watch?v=uXtOY5b4qwA









  • Os recomiendo dejaros pasear de la mano de Eduardo Lurueña en esto de las Artes Marciales y su filosofía... 






  • Y, por último, algunas palabras para la reflexión:




- Opus Dei El maltrato del cuerpo conduce a la salvación del alma

- Nelson Mandela: "El deporte tiene el poder de transformar el mundo. Tiene el poder de inspirar, de unir a la gente como pocas otras cosas… Tiene más capacidad que los gobiernos de derribar barreras raciales"


- Dión Crisóstomo:  "Realmente creo que los atletas tienen menos inteligencia que un cerdo” . Siglo I d.C.

- Eduardo Lurueña: - ¿En las artes marciales lo más importante es saber defenderse más que   
golpear? - "Cuando estoy con mis alumnos, con miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad o empresarios siempre hago hincapié en que más importante que saber defenderte es tener el control de tu vida"

- Thérèse Bertherar: "En este momento, en el lugar preciso en que usted se encuentra hay una casa que lleva su nombre. Usted es su único propietario, pero hace mucho tiempo que ha perdido las llaves. Por eso permanece fuera y no conoce más que su fachada. No vive en ella. Esa casa, albergue de sus recuerdos más enterrados, más rechazados, es su cuerpo" (El cuerpo tiene sus razones, 1976)

- Michael Jonhson: Por más fuertes que sean mis piernas, es mi mente la que me convierte en un campeón”


- Eurípides: De la gran cantidad de males que hay en toda Grecia, ninguno es peor que la raza de los atletas… esclavos de sus mandíbulas y vientres


- John Hulley: "Mens Sana in Corpore Sano. Liverpool, 1861


- Organización Mundial de la Salud (OMS):  SALUD es el estado de completo bienestar físico, mental, espiritual, emocional y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. La salud implica que todas las necesidades fundamentales de las personas estén cubiertas: afectivas, sanitarias, nutricionales, sociales y culturales









lunes, 4 de mayo de 2015

Cuéntame un cuento... con historias ocultas



 Hace algunos años descubrí que, escondidas en el cuento de "Alicia en el País de las Maravillas", habitaban en realidad montones de claves matemáticas, acertijos y paradojas con las que su autor, el matemático Lewis Carroll, le gustaba fantasear. Me quedé alucinada, claro. Resulta que la confundida Alicia era tan sólo un señuelo para guiarnos al universo matemático particular del autor. Y es que en ocasiones algunos cuentos son solo una excusa para contar cuestiones más profundas.

No estoy hablando de lo que cuenta Bruno Bettelheim en su "Psicoanálisis de los cuentos de hadas", Jorge Bucay con su "Cuentos para pensar" ni tampoco a las fábulas de Esopo... olvidaos de todo eso. Me refiero a personas que, dedicándose a otros menesteres, les da por escribir un cuento que resulta ser un éxito y pasan a la historia gracias a ello. Y tanto éxito tienen que sus historias se reeditan multitud de veces, se adaptan al cine y teatro en varias ocasiones durante más de siglo y medio favoreciendo, cual banderas o cilindros tibetanos de oración, la difusión de su mensaje, pero no de cualquier mensaje... 

 ¡Agarraos que vienen curvas! A partir de ahora leeréis o miraréis estos "inocentes" cuentos con otros ojos porque la fantasía es tan solo un disfraz colorido que enmascara algo mucho más soterrado.



Bueno, pues como ya he mencionado a "Alicia en el país de las maravillas" seguiremos con ella. Para empezar, el autor no se llama Lewis Carroll, sino Charles Lutwidge Dodgson, los dichosos pseudónimos... El pobre Charles tuvo una de esas infancias que es mejor no haber tenido pero a las que se sobrevive. Creció en medio de una atmósfera religiosa espesa y contradictoria con la mayoritaria, su educación fue inflexible, pero heredó de su abuelo y padre el don para las matemáticas a las que aplicó la misma actitud rígida que le habían inculcado a él.

Esta actitud no le ayudó nada a aceptar lo que se le venía encima, la novedosa matemática abstracta, gracias a la cual estamos donde estamos, tenemos la física que tenemos y, entre otras muchas cosas, nos comunicamos a distancia. Si por Charles hubiera sido la hubiera eliminado de un plumazo porque... ¿Qué era eso de que las ecuaciones dijeran que había muchas dimensiones cuando él solo veía tres?... Las matemáticas modernas no representaban la naturaleza real, eran absurdas, como el país de las maravillas. Y todo eso lo dijo con Alicia que la pobre, en su alocado viaje, se enfrenta a multitud de desafíos, contradicciones, personajes totalmente locos, situaciones sin pies ni cabeza, que rompían el mundo de la lógica, de lo real y lo natural formalmente establecido desde el gran Euclides.  Personalmente, me sorprende que un hombre con tanta creatividad y intereses tan vanguardistas como la fotografía no encajara esto, no se maravillara y emocionara con lo que estaba sucediendo con los números.




El siguiente cuento del que quería hablar es "El Mago de Oz" de Lyman Frank Baum... este sí que es raro. Podríamos empezar diciendo que todo lo que tocaba el bueno de Baum se fastidiaba, era un gafe vamos. Y es que tenía muy mala mano, ingenuidad o ignorancia llevando sus negocios, compañías teatrales y otras aventuras que no terminaban de cuajar. Pero de pronto escribió "El maravilloso mundo del Mago de Oz" y dio con la gallina de los huevos de oro. Claro, un tipo tan malo para todo escribe un cuento tan original y sorprendente... ¿tendrá truco?, me pregunté. Pues no lo sé y supongo que nunca se sabrá, pero desde que abrazó la Doctrina de la Teosofía parece que las musas acudieron a él y tocó el cielo, como su protagonista Dorothy, ascendiendo a través del arco iris.

¿Y qué tiene de oculto este cuento? Pues veréis, por motivos que no vienen al caso, investigo desde hace tiempo el mundo del chamanismo y un día mi cerebro realizó unas cuantas asociaciones de ideas. Me pareció que en "El mago de Oz" había mucho, muchísimo, de viaje iniciático al mundo superior. 


No, no estoy loca, de verdad, que esto está muy estudiado y en internet tenéis mucha información y libros de antropología buenísimos que lo demuestran: el arco iris, la ascensión al mundo superior, el camino de baldosas amarillas (doradas en el Budismo), los espíritus ayudantes, el maestro al que se va a buscar conocimiento, los desafíos y pruebas... Fue entonces cuando investigué al ingenuo de Baum porque él tenía que tener conocimientos  chamánicos y místicos profundos a la fuerza y... ¡Bingo! Así es como me enteré de su pertenencia a una de las más importantes e influyentes organizaciones ocultistas, la denominada Sociedad Teosófica, que tiene tela marinera de idiología de este tipo y fue fundada por la inquietante Madame Blavatsky. Ahí estaba la clave de Oz.

A grandes rasgos existen tres mundos en el universo chamánico: el superior, el inferior y el intermedio u ordinario, que es nuestro mundo físico. Oz es un viaje al mundo superior para aprender de sus maestros el camino de la iluminación. Así que, ya sabéis... si queréis una guía rápida y convertiros en "iniciados" no hay nada como leer este cuento.


Llegados a este punto me diréis que Alicia hace el mismo viaje pero al mundo subterráneo o inferior, quizás al mítico Agartha, de la mano de un animal de poder (con mucha prisa, por cierto) al adentrarse por su madriguera. Bueno, puestos a imaginar, quién sabe si las aventuras de Alicia con la Reina de Corazones tenga algo de ello pero no le pega al Charles Lutwidge Dodgson matemático, aunque quién sabe si al religioso.

En fin, con este panorama imaginaos como me quedé cuando uno de mis hijos me trajo del cole el único cuento escrito por el escritor Aldous Huxley, autor de "Un mundo Feliz", pues temblando. El cuento se llama "Los cuervos del jardín", pero vamos... me lo he leído y bien normalito, yo no he visto nada escondido por ahí o no estoy preparada para verlo o simplemente no hay nada que ver más que el cariño de rememorar unos agradables paseos por el bosque en familia. 

Los otros dos... ¡ya me parecían a mí de pequeña que eran cuentos muy raros!




¡¡¡ Feliz (con retraso) Día del Libro !!!




  • Os recomiendo este podcast, donde se explican bien clarito (para analfabetos matemáticos como una servidora) las claves de "Alicia en el país de las maravillas". Que lo disfrutéis!






Cerca del arco iris, un lugar, lo soñé 
tengo que creer, tengo que encontrar... 

Cerca del arco iris más allá 
Primavera en el Corazón 
y una paz sin fin... 

Un día una estrella escuchara lo que pedí 
y en un segundo... 
yo voy a despertar y dejaré la oscuridad cubriendo 
nuestro mundo... 

Cerca del arco iris donde el mar... 
cantará para mi es hora de despertar.. 

Cerca del arco iris donde yo he de encontrar es mi lugar !!!


  • Película japonesa "Viaje a Agartha" de Makoto Shinkai, rara rarísima pero así conocéis el mundo subterráneo ;)






martes, 17 de marzo de 2015

La increíble vida de la Hormiga León



 Los insectos, sí otra vez, no me gustan pero al final vuelvo a sacarlos a relucir, y es que no hay mundo más diverso y creativo que el de ellos, del que siempre se aprende algo nuevo.


El día que mi hijo pequeño salió del cole con un misterioso mensaje en la mano, "HORMIGA LEÓN",  pregunté inocentemente: ¿Hay que investigar sobre hormigas y leones?,  No - contestó- es un bicho que vive en la arena. Por suerte Google me lo confirmó.  Primera sorpresa. Y es que, al igual que el pueblo de Puertollano, ni es "puerto" ni es "llano", pues la hormiga león ni es una hormiga ni es un león. Segunda sorpresa.

Encontramos muchos videos en Youtube de naturalistas que se sumergen apostados con la cámara en el hipnótico ritual de observación de un ser, eso que nadie ve o considera irrelevante de cualquier parque. Al que le haya pasado esto lo comprenderá. Y es que no hay animal grande o pequeño que se resista a la mirada cotilla e indiscreta de un niño o adulto cuando descubre que hay otros mundos llenos de aventuras y desafíos, batallas a muerte y negociaciones que ni el Gran Hermano o un culebrón son capaces de superar. La naturaleza es así.

Yo no entendía cómo algunos estudiosos podían tirarse diez, veinte o treinta años en medio de la selva o la sabana observando a una sola familia de elefantes, chimpancés o suricatas, por ejemplo, hasta que en un viaje por Tanzania me quedé fascinada ante las escenas que delante de nuestras narices tenían lugar y quería quedarme a ver "el siguiente episodio" aunque tuviera que pasar la noche al raso entre fieras. Pero no hay que irse tan lejos para deleitarse con la asombrosa vida de los animales que, de primeras, nos enseña que todos tenemos problemas para buscarnos la vida.



Konrad Lorenz (ése que descubrió que los patitos le seguían a todas partes porque él fue el primer ser que vieron al nacer) cuenta en su maravilloso libro "Hablaba con las bestias los peces y los pájaros" que se quedaba horas contemplando absorto las vicisitudes de unos simples peces naranjas de acuario cuando jamás creyó que tuvieran una vida interesante. Con Lorenz aprendí lo crueles que podían ser las palomas con sus propios congéneres, cuando para nosotros son el símbolo de la Paz y del Espíritu Santo, y que los lobos se rigen por un código ético más elevado que el de los nobles caballeros medievales y, sin embargo,  tienen fama de todo lo contrario.



Bueno, pues la hormiga león cuando es una larva es un bicho feo, con forma de garrapata o piojo gigante, para entendernos, vamos que no es agraciado. Luego, cuando realiza la metamorfosis (un proceso alucinante) se convierte en una especie de libélula en pequeño. Pero, lo realmente increíble es cómo caza cuando es larva. Hace un hoyo en la arena a modo de trampa y se esconde debajo. Así, la desafortunada hormiga que caiga en su pendiente resbaladiza se verá atrapada al fondo por unas tenazas implacables que la succionarán a los abismos. Terrorífico y angustioso, de verdad, pobre hormiga, mosca o lo que sea que caiga en su trampa. Viendo estos videos, algunos encima con una música ambiental de suspense, uno se sumerge en un laberinto de emociones dispares en las que a veces se aplaude la huída de la víctima y otras se celebra la victoria esforzada de la paciente y fiera hormiga león, vamos, que ni una peli de acción. 

Pero, a lo que voy... ¿Cómo sabe este insecto que tiene que hacer una trampa de esa manera y esconderse bajo ella para poder cazar? ¿Cómo sabe la araña fabricar su red para que funcione? ¿Cómo sabe la abeja qué danza realizar a sus congéneres para indicar una dirección a seguir? Nos han explicado que su papel y pautas en la vida ya están determinados en gran manera, los animales no son libres, mientras que nosotros presumimos de ser los amos de nuestro destino y tenemos el don del libre albedrío... ¿seguro? Estamos casi tan limitados por nuestra biología e historia cultural como ellos, en cierta manera vivimos en una ilusión de libertad, como ellos.


Para ser un naturalista apasionado no hay que estudiar sesudamente durante años. Lo importante es tener buenas dosis de paciencia para observar, esperar, registrar conductas, tener un gran respeto por la naturaleza y muchas ganas de contar nuestros descubrimientos. Así lo han hecho los grandes desde que eran niños: Félix Rodríguez de la Fuente, David Attemborough, Jacques Costeau, Konrand Lorenz, Gerald Durrell, Jane Goodall y, ¡cómo no!, Frank Cuesta, reflejo todos ellos de su tiempo. 


Sí, todos han contribuido a sacarnos de la ignorancia por su gran pasión y entrega no fingida, que les salía del alma, tanta como para poner muchas veces su vida en peligro. El impacto que provocaron, y provocan, con sus series documentales, publicaciones, conferencias y su sola presencia, es enorme. Solo hay que ver sus caras... ¡Necesitamos a más como ellos!



Hoy los niños no juegan en la naturaleza como antaño, otras ocupaciones les entretienen. Pero, cuando van al campo y superan el mono de la consola o cualquier otro juguete y se tienen que conformar con palos y piedras, un río, cortezas de árboles y bichos... comienza el hechizo, se sumergen en una aventura fascinante de la que a duras penas se les puede arrancar ni para que se coman el bocadillo. Entienden antes que nosotros lo que ya dijo el poeta: "...ver el mundo en un grano de arena y el Cielo en una flor silvestre"



También descubrí hace poco haciendo limpieza unas viejas revistas "Natura", años '80, ejemplo de una época de denuncia de malas prácticas, de divulgación elegante y apasionada, cuando todo esto de la Ecología estaba por hacer y acabábamos de quedar huérfanos de Félix. ¿Será que el mensaje ya ha calado lo suficiente y no se necesitan estas revistas y programas o es que lo hemos olvidado?


Salir con un cuaderno de campo, una red de pesca o unos prismáticos a la naturaleza con el único objetivo de descubrir algo interesante y desconocido es una gozada.

Llega la primavera... ¡DISFRUTADLA!


Para ver el mundo en un grano de arena,

Y el Cielo en una flor silvestre,

Abarca el infinito en la palma de tu mano
Y la eternidad en una hora.

Aquel que se liga a una alegría

Hace esfumar el fluir de la vida;

Aquél quien besa la joya cuando esta cruza su camino
Vive en el amanecer de la eternidad.


William Blake


Os recomiendo:

 
Fundación Félix Rodríguez de la Fuente:  

http://www.felixrodriguezdelafuente.com/



Konrad Lorenz y su libro de lectura fácil y maravillosa 

"Hablaba con las bestias los peces y los pájaros"



Otra delicia literaria, de Geral Durrell 
 "Mi familia y otros animales"



jueves, 26 de febrero de 2015

La Teoría del Todo y mucho más




Cuando a alguien con una mente genial, que ve más allá de lo que ven los más iluminados, es sentenciada al silencio y a la muerte es como si el destino o los dioses le gastaran un broma macabra. 

Eso le ocurrió al joven Stephen Hawking que, por un lado le bendijeron con un superpoder y por otro con una enfermedad terrible que le impedía moverse y hablar, entre otras cosas, convirtiéndolo en un pelele cada vez más retorcido y que, por desgracia, no se cura con tirarse un cubo de agua helada encima (aunque eso ayude, claro). Pero dentro de ese cuerpo que apenas le obedecía la mente de Stephen seguía funcionando ¡y a todo trapo!

¿Que no habéis visto la película? Pues el actor, Eddie Redmayne, ha ganado el Oscar por su increíble interpretación que hace dudar en muchas ocasiones si son imágenes del Hawking real o no. La actriz Felicity Jones (esposa de Hawking) está también increíble y la historia de este físico teórico superstar está narrada con exquisitez. Sentimientos a flor de piel a lo largo de todo el film que, únicamente, a los que nos gusta la ciencia creemos que le falta chicha, que no se moja más que un pelín en las teorías físicas del genio.


¿Qué es el Tiempo? ¿Qué papel juega en el Universo? ¿Qué son las estrellas y los agujeros negros? ¿Existe alguna teoría que unifique todas las que existen sobre ello? ¿Existe una ecuación elegante y sencilla que responda a todos los interrogantes? Algunas de estas preguntas nos las hemos hecho muchos sobrecogidos ante el inmenso cielo de una noche de verano. A Stephen Hawking le bastaba con atascarse bajo su jersey para ver lo que nadie ve en la búsqueda de la ansiada Teoría del Todo.



Premios por doquier, libros que son bestseller... el nombre de Stephen Hawking vende. Todo lo que dice sobre el mundo, los extraterrestres o los viajes en el tiempo sale inmediatamente en los titulares de todos los periódicos... "lo ha dicho el sabio Stephen Hawking" (al menos se escucha a uno). Sí, la verdad es que la maldición lanzada sobre él fue una verdadera chapuza, pero es que tenía un as en la manga...

La vida de Hawking es de cuento de hadas, tanto que le han hecho hasta una peli. Es como aquella bella durmiente que siendo un bebé fue maldita por una bruja vengativa y envidiosa cuando las otras hadas ya le habían dado el don de la inteligencia, la sensibilidad y el buen humor. Pero, si conocéis el cuento, tras el desastre aún quedaba un hada que hacía un apaño para que las consecuencias no fueran tan malas y el que se hizo con Stephen Hawking fue el mejor de todos. Le bendijo con la presencia y amor en su vida de Jane Wilde, su primera esposa.




Y es que el sacrifico de Jane para con Stephen fue total. Cuidar a un enfermo totalmente dependiente a tiempo completo y con tres hijos pequeños, renunciando a sus grandes pasiones intelectuales en pos de las del genio es el verdadero descubrimiento del que os quiero hablar en esta entrada. Jane renunció a todo para hacer feliz a su amor el tiempo que le quedara de vida, en principio dos años. Pero fueron muchos más y la enfermedad iba a peor y su propia vida a la deriva. El agotamiento físico y psicológico, el cansancio y la desesperanza, hicieron mella en la buena disposición, candidez y sueños de amor poético de Jane, dándose de bruces con la dura realidad, como si Don Quijote despertara horrorizado de su ensueño tras chocar con los molinos y descubrir que no es un caballero al rescate sino un pobre anciano que no puede con su alma. Y claro, algunos dudan de ella y la echan en cara el querer sentirse viva.


Conozco a gente en situaciones muy parecidas y el destrozo mental y físico es tremendo. ¿Quién se acuerda del cuidador? ¿Quién le da descanso y aliento? ¿Dónde están las ayudas de dependencia? Todos valoramos su capacidad de entrega pero están cumpliendo con su deber, no? Así que se les niegan los sentimientos de hastío, de soledad, de amargura, del ya no poder más y los de desear ser amados. La película también cuenta la evolución de esta relación que se comporta como dos galaxias a la deriva en la expansión del universo. El cambio en el rostro y las maneras de Jane, que pasa de ser una joven decidida y entregada a ser una mujer rota de agotamiento es evidente. 

Y al final, como las interminables partidas de ajedrez que juega Stephen consigo mismo, todo queda en tablas, sin rencores, con cariño y un respeto profundo, mucho más que como acaban algunas parejas.




Mi Oscar particular, mi Príncipe de Asturias y todos los premios habidos y por haber, se los dedico desde aquí a Jane y a todas aquellas personas que cuidan y ayudan a que otras sigan viviendo y aportando lo que pueden a los que les rodean, aunque no sea algo tan loable y ambicioso como descifrar la Teoría del Todo.


Os recomiendo esta película. Toda una lección de coraje por parte Stephen y Jane. Que la disfrutéis!



BlogQuieroCine: crítica de la película






Página web con consejos y ayuda para personas que cuidan a otras. Seguro que a Jane le hubiera venido de perlas: http://www.sercuidador.es




domingo, 8 de febrero de 2015

Pasarse la tarde jugando


  

Desde hace algún tiempo asisto alucinada a la gran cantidad de juegos de ordenador, consola y tablets, por no hablar del gran negocio que suponen. Su realismo, temática y opciones, sus grandes encuentros, que dejan por los suelos a cualquier congreso médico que se precie, y sus campeones. Pero lo de que de verdad me alucina es la cantidad de canales que hay en YouTube donde gente corriente, de toda lengua, cultura y condición, sube sus partidas previamente grabadas con sus  propios comentarios.

Juegos en línea donde varios participantes, cada uno vete a tú a saber en qué lugar del mundo está, comentan las jugadas como si estuvieran todos alrededor de una mesa jugando a Catán pero a lo bestia. Los llamados YouTubistas tienen miles de suscriptores que observan, hacen sugerencias o críticas de jugadas y jalean a sus ídolos. Yo, al principio, me dije que la gente está fatal de la cabeza, de verdad, pero esto está muy extendido y divierte tanto a los que lo realizan como a los que siguen el juego como espectadores. Entonces, algo tiene que tener  ¿no?

Bueno pues buscando otras cosas en Youtube me tropecé con este tipo de videos. Ni que decir tiene que mis hijos se hicieron fans desde el minuto uno, dando igual si los comentarios estaban en inglés, alemán o mandarín, la abducción era total, sobre todo con el Minecraft.

Si no sabéis de qué va el Minecraft, yo tampoco lo sabía, dejad que os cuente brevemente para que parezca que estáis a la última si os sale la conversación. Es un juego feo, pero feo, feo, como si estuviera super-pixelado y fuera de esos antiguos juegos ochenteros con gráficos simplones... pues es tan feo que es bonito, la mar de divertido y hasta educativo. Se trata de un juego de construcción de bloques sin reglas establecidas. Hay que crear mundos, buscando recursos, construyendo refugios, palacios o lo que vosotros queráis, animales, máquinas... y al final te olvidas de la estética porque hasta te gusta, el realismo se deja a un lado para que sea la imaginación la dueña y señora a la hora de crear huertos, picar montañas y matar zombis. Sus creadores, dos suecos apodados Notch y Jeb, también se sorprendieron cuando arrancó en el 2009 la andadura de Minecraft y tuvo tanto éxito. Ni que decir tiene que ahora están forrados.

Ya sabéis: gráficos sencillos, mecánica de juego simple que se puede ir complicando cada vez más y la oportunidad de crear vuestro propio mundo usando solo la imaginación, el límite lo ponéis vosotros. Si queréis aprender este juego es mejor que vayáis a estos canales de Youtube, en casa nos encanta Planeta Vegetta, su creador es muy simpático y no dice tacos (para los niños es importante).


Pero, al descubrir este juego por ordenador inventado por dos nórdicos, me vino a la cabeza otro juego también sueco que hacía bien poco había visto en el maravilloso mercado medieval de Alcalá de Henares (Madrid). ¿Y qué se puede encontrar en un mercado medieval? Pues, en lugar de juegos de ordenador, un juego de mesa vikingo, entre muchos otros de la familia de juegos tafl, el Tablut. Este seguro que no lo conocéis, ni creo que muchos suecos hayan jugado alguna vez en su vida al mismo. Si en la Edad Media el ajedrez era la madre de todos los juegos, el Tablut es un hermanito menor muy entretenido que ayudaba a pasar el rato a las tropas vikingas entre saqueo y saqueo. El tablero de juego podía ser bonito y de madera o, como el que tengo yo, de piel, una piel que sirve a la vez de bolsa para guardar las piezas, muy práctico para llevar encima. 





Dos jugadores que controlan dos bandos de guerreros en desigualdad de condiciones, en número, propiedades de las fichas y objetivos a alcanzar. En este caso moscovitas contra suecos, los moscovitas tienen que atrapar al rey sueco que intenta escapar. Pues así se divertían antes y ahora también se puede uno divertir, la verdad. Algunos lo están recuperando del olvido, como Daniel, el artesano que me lo vendió y que se ha especializado en la fabricación de estos juegos históricos y tradicionales. Tras todos los ajedreces y juegos antiguos que exhibe hay mucho trabajo de documentación, buscando en legajos, pidiendo ayuda a la embajada noruega y contactando con algún especialista que queda por ahí. Todo esto lo sé porque me lo ha contado él mismo con toda la disposición, paciencia, entusiasmo y desparpajo del mundo. En medio del ajetreo de curiosos viandantes parados ante su vistoso puesto de este gigantesco mercado medieval Daniel te explica las reglas de cada juego, su significado y todo lo que quieras saber. De tesis doctoral, vamos. Tranquilos que os pasaré un enlace por si queréis indagar y de paso hagáis un regalo vistoso si os veis en la necesidad.



Los juegos cambian de formato con los tiempos y la tecnología, pero todos se basan al final en lo mismo. No solo entretienen, sino que hacen compartir momentos divertidos con los amigos o con uno mismo, hacen que nos detengamos y ralenticemos ese círculo vicioso mental en el que estamos atrapados, refrescan nuestra memoria, relajan nuestros músculos e ideas antes de reincorporarnos a nuestra vida cotidiana y seguir siendo lo que somos.


 Y qué bien se lo pasaba uno (o se lo pasa) jugando, al parchís, al Supermario, al Laberinto, a Dragones y Mazmorras, al Monopoli o las cartas toda la tarde, sobre todo esas de frío, oscuridad y lluvia. La luz y el calor llenan la estancia porque los pone la imaginación y nuestras risas. Y es que lo lúdico nos hace felices y no es exclusivo de la infancia aunque la magia y el entusiasmo que acompaña a estos momentos quizás sí, quizás de adultos no disfrutamos con tanta intensidad. Mal hecho. No hay nada como encontrarse un juego de esos de antes con los que jugábamos hasta hartarnos. A mí me pasó recientemente con el emblemático e inencontrable Imperio Cobra de Cefa, con el que volví a subirme a bordo del ave fénix y sobrevolar  el palacio de cristal, el templo de las mil puertas o el mar de niebla, e incluso, consultar el oráculo ¡Toda una experiencia!



Sí, para los juegos no hay edad. Os recomiendo una película argentina, "Rompecabezas", donde una mujer (la actriz María Onetto) reencuentra su lugar en el mundo gracias a los puzzles. Casualmente descubre que posee un gran talento para su resolución y entonces comienza a competir por equipos y eso cambia la perspectiva de su vida. La película toca de manera delicada una revolución en la mente de una mujer de mediana edad que parece ser invisible para todos los que la rodean.



Sea con el Minecraft o con el antiguo Tablut, lo bonito de jugar es que nuestra mente se concentra durante un buen rato en una estrategia o guión imaginario de tal manera que, si los científicos nos pusieran electrodos mientras lo hacemos, descubrirían que estamos sumergidos en estados de flujo, de atención plena o meditación, como quieran llamarlo, vamos, que es muy bueno para nuestro equilibrio mental. Y es que el juego y lo que sentimos, lo que compartimos, es una terapia, es el modo más natural de aprendizaje, de hecho todos los animales aprenden las competencias más importantes para su vida jugando. Los juegos remueven nuestro interior de tal manera que impulsan cambios extraordinarios. Por eso existen montones de dinámicas de grupo que se alimentan de ello y así conseguir reflexiones en los participantes a través de las vivencias y emociones movilizadas con el juego en cuestión.


¿A alguien se le ha olvidado lo que era jugar y sentir todo eso? Si es así no os preocupéis... ¡No es demasiado tarde!


Os pongo unos enlaces interesantes:



 Taller Artesano Arcana de Juegos históricos










Clubs de Juegos de Mesa:






Película "Rompecabezas". Dirección y guion: Natalia Smirnoff. Países: Argentina y Francia. Año: 2009.



TRAILER







Reportaje de Antena 3TVhttps://www.youtube.com/watch?v=3icc1slgNNI 





PLANETA VEGETTA:

¡¡¡ Hey, muy buenas a todos, guaaapísimos !!!